La ciencia del comportamiento inconformista

¿Estás cansado de ser conformista? ¿Quieres romper las reglas y cambiar las cosas? ¿Eres un Maverick?
Los inconformistas son conocidos por su pensamiento poco convencional, por asumir riesgos y por su capacidad para desafiar el statu quo. Pero, ¿qué impulsa su comportamiento? ¿Es pura audacia o hay algo más? Resulta que la neurociencia tiene algunas ideas interesantes sobre los cerebros de los Mavericks.
En primer lugar, definamos qué entendemos por Mavericks. Los inconformistas son personas que piensan fuera de la caja, rompen las reglas y desafían las convenciones. Son los Steve Jobs, Elon Musks y Richard Branson del mundo. Toman riesgos, aceptan el fracaso y tienen un don para la innovación.
Entonces, ¿qué hace funcionar a Mavericks? Según la Dra. Camila Scaff, neurocientífica de la Universidad de Duke, los Mavericks tienen un cableado neuronal único que los hace más cómodos con el riesgo y la incertidumbre. Tienen una mayor tolerancia a la ambigüedad y es más probable que busquen experiencias novedosas.
De hecho, un estudio realizado por la Universidad de Bonn descubrió que los Mavericks tienen una corteza cingulada anterior más grande, una región del cerebro que desempeña un papel en el procesamiento de la incertidumbre y la detección de errores. Esto significa que los Mavericks están mejor equipados para manejar la incertidumbre y están menos disuadidos por el fracaso.
Pero hay más Los inconformistas también tienen una conexión más fuerte entre su corteza prefrontal y su amígdala, que es la región del cerebro que procesa las emociones. Esto significa que los Mavericks pueden regular mejor sus emociones y son menos propensos al comportamiento impulsivo.
Pero aquí está la cosa: los Mavericks no solo nacen con estos rasgos. También los desarrollan a través de la experiencia. El Dr. Scaff señala que la exposición a la adversidad y la asunción de riesgos en realidad puede cambiar la estructura del cerebro, haciendo que las personas se sientan más cómodas con la incertidumbre y el riesgo.
Entonces, si quieres convertirte en un Maverick, no se trata solo de tener un cierto conjunto de rasgos. También se trata de exponerse a desafíos, asumir riesgos y aceptar el fracaso.
Caso en cuestión: tome la historia de Sara Blakely, la fundadora de Spanx. Blakely comenzó su empresa con solo $ 5,000 y mucha determinación. Enfrentó innumerables rechazos y reveses, pero persistió. Y ahora, Spanx es una marca de mil millones de dólares.
La propia Blakely atribuye su éxito a su voluntad de asumir riesgos y aceptar el fracaso. Una vez dijo: “No tuve ninguna exposición a los empresarios mientras crecía, pero sí tuve exposición al fracaso. El fracaso se volvió aceptable para mí. No se volvió cómodo, pero estuvo bien”.
Entonces, si quiere ser un Maverick, acepte el fracaso, asuma riesgos y desafíe el statu quo. Y recuerda, no se trata solo de tener los rasgos correctos. También se trata de desarrollarlos a través de la experiencia.
Otras lecturas:
- “La mentalidad inconformista” de John Eliot
- "Excepciones" de Malcolm Gladwell
- "Originales" de Adam Grant