
Cada vez más, los vehículos a gas natural están encontrando su lugar en las carreteras, especialmente en aplicaciones municipales y comerciales. Sin embargo, para que el gas natural sea un combustible viable para los vehículos, debe comprimirse. Esto permite almacenar más combustible por volumen, entre otras cosas.
Entonces, ¿cómo se comprime el gas natural?
Hay muchos métodos diferentes que se utilizan para comprimir gases. Cuando se trata de gas natural, el método más común es el " compresor de diafragma ".
El compresor contiene una serie de cámaras, cada una equipada con una membrana especialmente diseñada. El gas se bombea a la primera cámara, donde el volumen se contrae por la membrana. Una vez que esta cámara está llena, se vacía en la cámara siguiente, más pequeña, y así sucesivamente hasta que el gas natural alcance la presión deseada.
Una vez terminado el proceso, el gas debe mantenerse a presión en tanques, como los que se ven en la fotografía superior.